Infancia. Granja Los Pibes inauguró pileta para sus jóvenes y niños: un sueño hecho realidad con mucho esfuerzo

La idea de construir la piscina surgió hace más de un año, motivada por el deseo de brindarles a los niños un espacio propio para disfrutar del agua, sin tener que trasladarse al tanque australiano que utilizaban anteriormente. Si bien este tanque les sirvió durante mucho tiempo, la comunidad de la granja anhelaba un espacio de mayor calidad.

Fernández relató cómo la construcción se convirtió en una verdadera muestra de esfuerzo y solidaridad. Inicialmente, consiguieron un apoyo económico de 7 millones de pesos a través de una gestión del diputado Rogelio Iparraguirre ante el gobierno de la Provincia, pero este monto no fue suficiente para cubrir los costos del proyecto. La granja aportó 11 millones de pesos adicionales, pero aun así faltaba dinero para llevar adelante esa pileta de 11 metros por 7 y piso de venecitas.

Fue entonces cuando un grupo de trabajadores de la granja, Emilio, Matías, Lucho, Germán y Marcelo, se ofrecieron a construir la piscina ellos mismos. "Walter, si nosotros hicimos las casas de la granja, hicimos la casa roja, hicimos la otra, mira si no vamos a hacer una pileta", desafiaron.

Durante todo el invierno, después de sus jornadas laborales en la granja, dedicaron su tiempo y esfuerzo a la construcción. "Te digo que los vi de noche con reflectores, armando todo el encofrado para el hormigón", recuerda Fernández.

La construcción no estuvo exenta de dificultades. La ubicación de la granja, cercana al arroyo, implicó que la excavación se llenara de agua, lo que obligó a constantes pausas en la obra. Sin embargo, la determinación del equipo y el objetivo final de darle a los niños un espacio de recreación los impulsó a seguir adelante.

Fernández describe la piscina como "una pileta hermosa" y destaca que estará disponible para la Escuela de Verano, el programa provincial del que la granja forma parte cada año.

Más allá de este uso institucional, a partir del lunes, si el clima lo permite, los niños podrán comenzar a disfrutar de este nuevo espacio.

Pobreza creciente

Por encima de la alegría por la inauguración, Fernández también expresó su preocupación por la situación económica que atraviesa el país. Mencionó las cifras de pobreza infantil (20% de menores en la indigencia) y la dificultad de poder ayudar a todos los niños que lo necesitan. "Abrazamos lo que podemos, pero no podemos abrazarlos a todos", reflexionó, dejando en claro el compromiso, pero la insuficiencia del aporte de la Granja al problema de pobreza que tiene la ciudad.

Fernández enfatizó la importancia del trabajo como motor de una sociedad justa: "Nosotros no tenemos dudas de que la sociedad tiene que ser una sociedad de trabajo". La granja, además de brindar un espacio de contención para los niños, también busca formarlos para que en el futuro puedan integrarse al mundo laboral.

El fundador de la granja destacó el legado de trabajo y solidaridad que se transmite de generación en generación en la comunidad. Recordó que algunos de los primeros niños que llegaron a la granja, hoy, con más de 40 años, siguen colaborando. En esta ocasión, un grupo de jóvenes de entre 24 y 25 años, liderados por Emilio, fueron los responsables de hacer realidad el sueño de la piscina.

Reconocimientos

La inauguración de la piscina en Granja Los Pibes también tuvo un tiempo para el reconocimiento a las personas que vienen acompañando desde hace tiempo cada uno de sus proyectos y necesidades. Recibieron un presente: Jacinto Nuñez, Floreal Pastor y Juan Monsalvo (recibido por su esposa e hija).

También acompañaron referentes del grupo Chicos del Pueblo. Jaqueline Sánchez, de Lugar del Sol (Berazategui), Pili Montiel, de Juntos a la Par (Ensenada), Fiamma Solis, de La Casita de los Pibes (La Plata), Paula Salinas del Instituto Patria y chicos del pueblo, y Quique Spinetta, fundador de Chicos del Pueblo